Yo no se que escritor decía que quedarse así, sin hacer nada, meditando sobre tantísimas cosas, no era inútil. Era necesario. Era pasarse en limpio. Ah. Ya me acorde. Era German Dehesa. Y en nadamenos que la revista Quién. Sue me. Estaba en Huásabas, donde el material de lectura es escaso. Con decirles que hasta me leí el cinco minutos de junio *casi completo* -sí, ese librito que publica la grey católico apostólico romana para la gente que no tiene nada que hacer-. Y yo no tenía nada que hacer. Parecía alma en pena sin mi amada conexión a Internet. Así que finalmente me harté y me fui al monte a tomar fotografías y a que el sol me quemara la piel y a tratar de anestesiar por un momento el dolor que no me deja vivir en paz. Pero decía que pasarse en limpio es una falacia. Digo, Dehesa decía que en el artículo que por cierto era una revista atrasada (diciembre, creo, y por Dios, en esa revista solo hablan de quien se caso con quien, quien va a tener un hijo de quien, que se puso quien.... QUIEN you get the idea) que ya tenía tantos años y tantas experiencias acumuladas que preferia quedarse en su sillón a "leerse" a si mismo que salir a hacer cualquier otra cosa, o leer cualquier otra cosa. Meditar sobre el trabalenguas en el que poco a poco se va convirtiendo la vida de uno, pues. Pasarse en limpio. Sí, como no. Yo me la paso haciendo eso y la hoja siempre termina llena de borrones. Otra vez llena de borrones y hecha una bola de papel y a la basura. Bueno, a veces hago un avioncito, pero nunca me salen bien. Por más que quiero hacerlos volar, se van en picada.
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Happy friday.
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