September 06, 2005

Weird Days (cellphone-o-less)

Hoy ha sido un día extraño desde el momento en que me desperté. ¿Ya saben como hay días en que un montón de pequeñas cosas salen mal desde que uno sale de la cama? Y es uno "de esos días"... Pero hoy todo ha sido al revés. Con pequeñas sorpresitas agradables. Oh! Funciona! Ah! Ya era hora. Y una sensación general de bienestar tan extraña... A ver... ¿estoy tomando drogas? No. A no ser que el Syncol y los antibióticos cuenten como tal. Lo que sí es que ayer me escapé temprano de la oficina. Aproveché para dormir un rato por la tarde. Visité una amiga (y sí, me senté en el porche de su casa a platicar un rato, de trivialidades, de nada, del pueblo), llegué a casa y (sabía que no podría dormir) tomé (con placer, sí con placer) un líbro de filosofía que tengo a medio leer. Me perdí pues en Spinoza, Kant, Schiller... Iba a empezar con Hegel cuando me di cuenta que era la una (en el teléfono que por cierto, tenía olvidado en la cama desde el domingo por la mañana, bendito silenciador, y una disculpa a quienquiera que me haya llamado, pero no soy esclava de esa cosa, no soy -no quiero ser-, esclava de nada). Hora de cenar, pues, y de tratar de dormir. Algo ligero. Y a ver, qué me podría dormir... Tomo un libro de cuentos mexicanos con prólogo de Monsiváis. Dicho y hecho, no soporte el prólogo, a las tres páginas puse el libro encima de uno de Cortázar, y subí a perderme en los brazos de Morfeo. El único hombre con el que me interesaba dormir. (Siempre se hace el difícil).

2 comments:

Los Elmers said...

Pue que no sea cuestion de que pasen... sino que te des cuenta.

.´O

Talya said...

Yo *siempre* me doy cuenta.

Si pudiera desconectarme, tal vez podría dormir, y no solo quedar en un estado de semi-inconsciencia cuando creo que todo está semi-bajo control and I can take a f´n break.

Ok it has been four days without coffee now. Estoy desvariando. Pero no me duele el estómago... jajajaja