Cuando era pequeña, era terriblemente soñadora. Yo no vivía en el mundo de las demás niñas. Jugar a las casitas, ayudar a mamá en la cocina, las muñecas. No. Eso no era para mí. Yo vivía en un mundo en el que había hadas de cabellos azules, ideales, flores extrañas que había que encontrar tras largas travesías, sierras nevadas. Un mundo en el que el bien y el mal coexistían y había redención. Y las horas se sentaban ante una mesa de té y lo confundían todo y una niña seguía un conejo una tarde de verano y un gato sonreía y una reina quería cortarle la cabeza a todo el mundo. Un mundo en el que había bondad, en el que la mirada de un par de ojos negros revelaba el universo. Un mundo en el que tu apellido lo decidía el animal que pasaba primero por el montoncito de arena que dejaban afuera el día que nacías. Y a veces era una bicicleta. Un mundo de acertijos y misterios que resolver. De piratas, indios, y gente pragmática que se ganaba el beso escondido en el rincón de la boca y no quería tomar la medicina. Un mundo en el que a final de cuentas, a uno, por tener la confianza de un niño, le quitan las cosas mientras uno se queda mirando con la boca abierta, atónito, sin poder comprender. Y en el que un soldado cae por la ventana y va en su barco de papel y se lo traga un pez y la bailarina es consumida por el fuego, y el idiota le ganaba al noble y la curiosidad era una rata y el lobo se comía a los cochinitos y la princesa brudulbudura cambiaba la lámpara vieja por una nueva y el castillo desaparecía y Sherezada inventaba historias cada noche y Simbad llegaba a tierras mágicas y Ulises escuchaba el canto de las sirenas y a platero le gustaban las granadas. Eran tan rojas y dulces. Y nadie sabía quien era a ciencia cierta y el amor era siempre trágico.
Miren que casualidad.
5 comments:
Te falto decir hakuna matata o supercalifrajilisticoespialidoso... para que describieras todas las peliculas animadas de disney
Bueh... Apenas es la parte I (parte I=6 años), y para mi suerte o mi desgracia, el universo no provenía de las películas de Disney sino de los estantes de la biblioteca pública municipal. Las historias originales, pues. Sucede que cuando uno lee los libros a los 6 años, y después le ponen enfrente la película, esta no deja de parecer estúpida, quizá porque se pierde el diálogo que en el libro de alguna manera se mantiene con el escritor, o porque la cursilería de las canciones (in-so-por-ta-bles) desencadenan un coma diabético. O las imágenes a cuadro por segundo acorralan lo que las letras dejan volar. ;*)
Oye, ¿en qué película de Disney la curiosidad era una rata? ¿Esa también la hicieron? Eh? La que si no te creo es la de Platero.
Juan Ramón Jiménez es demasiado para ellos, aunque mejor no los conjuro. >:*/
Si no es de disney.... es de la FOX... (tantos "malos"* recuerdos azotan mi mente cuando Pienso en ese nombre corporativo...Los simpsons.).....
Lo que si se me hace tetrico es que leyeras los 12 capitulos de "Las aventuras de alicia en el pais de las maravillas"... Espero que hayas leido un libro basado en la caricatura de disney...sino, me extrañaria que ahorita no seas una megaperverninfomana con todos trasfondos sexuales que tiene la novela.
ya me acordé donde una rata (o raton... el caso es que era roedor)que servia de conciencia y apoyo moral (Ademas de bernardo y bianca) en la cenicienta... que segun esto las ratas se compadecian de la cenicienta y junto con los demas animales eran sus unicos amigos.
Oye Kaju, pues quien te dice que no soy una megaperverninfómana (ah como te gustan las palabras largas).
Digamos que, en el departamento de lo tétrico, los 12 capítulos de Lewis Carroll son *lo de menos*
Oh. Y todo original. Bueh. Excepto por lo que pueda perderse en la traducción al español. Nada de condensados o "basados en". Brief is for the weak >;*)
No No. La rata esa venía en una compilación de cuentos. Eran tres. Uno trataba de una tipa y un imbécil. La cosa era en Navarra. Pamplona... Hmmm. El otro una jovencita y esta rata, que en realidad era una bruja. La cosa era bastante mordaz, digo, para ser un cuento... Y yo a mis tiernos 6. No se porque a mi madre se le ocurrió enseñarme a leer tan peque. Digo los demas apenas estaban con el ABC y yo estaba inmersa en aquellas intrigas...
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